Asimismo, el documento apunta que posee una tasa de mortalidad muy alta, matando a más del 50% de los pacientes infectados.
A diferencia de tipos más comunes de CRE, esta superbacteria lleva un plásmido o una pieza móvil de ADN junto con una enzima que descompone los antibióticos. Así, lo que la hace aún más peligrosa es su capacidad para transferir a las bacterias normales que están presentes en nuestros organismos ese plásmido y la resistencia a los antibióticos.
La “amenaza fantasma” ha tenido una reseña menor ya que no ha sido un focofrecuente en las pruebas y ha escapado en gran medida a la detección por las autoridades de salud por ser actualmente menos resistente a los antibióticos que otros tipos más comunes de CRE. “Se trata de una bacteria resistente difícil y no es fácil de encontrar”, ha declarado el director del CDC, Thomas Frieden.
El CDC reporta que se han registrado al menos 43 pacientes en 19 estados infectados con este tipo de superbacteria entre junio de 2010 y agosto de 2015 (un paciente en 2010 y 11 pacientes cada año a partir de 2013). Aunque la cantidad de víctimas es relativamente pequeña, Frieden sostiene que solo son “la punta del iceberg”.
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Colegas Microbiólogos les invitamos a responder estas preguntas:
¿A que aislado se pueden estar refiriendo en esta reseña?
¿Como detectarían este mecanismo de resistencia en el laboratorio?
¿Contamos en Venezuela con métodos para su detección?
¿Cual seria la terapéutica a utilizar?
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